miércoles, 4 de enero de 2017

El sexismo lo llevamos puesto.



Antes de leer esta entrada aconsejo que mireis el artículo que aparece en el enlace y que tiene como título el siguiente:

Camisetas sexistas: "Entrenando para ser la mujer de Batman" y otras seis prendas polémicas.

http://www.huffingtonpost.es/2014/10/01/camiseta-sexista_n_5911968.html


Lo cierto es que es un poco irritante que las grandes empresas extiendan el machismo a todas las escalas posibles y tengan que ser los consumidores los que protesten de los valores desiguales y opresores que estan fomentando.

Sería lógico pensar que no solo es culpa de que el consumidor compre prendas que lleven implícito y a veces explícito el sexismo, sino del gobierno y de las empresas que deberían obrar para mejorar la sociedad y no con intenciones de enriquecerse materialmente al coste que sea, incluso menguando la dignidad de la población.

Nos hablan de libertad al vestir, que podemos elegir que ponernos o que no ponernos y que al menos no llevamos un uniforme.  Pero realmente esa  libertad a la hora de vestir no aparece  en ninguna parte, tal vez esas limitaciones no las formule una ley, pero las ampara la misma, la sociedad. Seguramente, en occidente sean pocos los hombres con falda que hemos visto  y si los hemos observado seguramnete hasta su sombra los criticaba. Estas críticas ocurren, de una forma un poco más difuminada, con la ropa, las prendas destinadas a mujeres sulen ser más ajustadas, con eslogans como los vistos en el artículo.  Además, los modelos de ropa se repiten, los cortes y estilos son prácticamnete idénticos, entonces no somos libres de vestir lo que queramos, sino de elegir entre elemntos similares bajo la presión de la sociadad y los propios valores.

Como futura docente veo imprescindible dotar de un pensamiento crítico a mis futuros alumnos, a través de la duda y la reflexión.

Aquí dejo un vídeo que vi hace tiempo y  demuestra que mis intenciones son posibles, en el que una niña piensa que la ropa debería de ser unisex y explica con detalle como se siente ella cuando ve las prendas dedicadas a su género.

Niña critica la ropa de niña vs la de niño.



martes, 3 de enero de 2017

Furia ¿Es importante saber desde dónde se lee, si desde la clase alta o desde la trabajadora?


Furia ¿Es importante saber desde dónde se lee, si desde la clase alta o desde la trabajadora?/ JUAN JOSÉ MILLÁS

 

Os dejo aquí el enlace del artículo:

 

http://elpais.com/elpais/2015/04/16/opinion/1429192296_852250.html


Si que es importante saber desde que clase social se lee y qué se lee, pues cuando leemos solemos acercarnos al protagonista o protagonistas creando empatia e incluso convirtiéndonos en ellos.
Cuando una persona de clase baja lee un libro dedicado a la clase alta seguramente le desagrade, pues no podrá empatizar porque realmente nunca lo ha vivido. Sin embargo, es cierto que actualmente se nos ha educado para desear alcanzar el poder económico y social de la clase burguesa a través de libros y películas.

 El objetivo de esta educación es alimentar la esperanza o mejor dicho la ilusión de lograr esas camódidades y caprichos basándose en que conseguir todo lo que deseamos ( lo que quieren que deseemos) es posible si hay esfuerzo y dedicación, pero todos sabemos que no es así. También se puede dar otro caso, que asumamos ser la clase baja y nos deleitemos viendo como esa otra clase social se divierte en las grandes fiestas ,trabajen lo mínimo, coman comida deliciosamente cara y otras cosas fuera de nuestro alcance.

En cualquier caso, los libros y películas perseguirán, en un gran número de veces, alimentar nuestra ilusión. Para conseguir este propósito se basan en una mujer u hombre que va desde la máxima miseria y pobreza ( pueden morirse sus padres o uno de ellos, eso es bastante trágico) a la riqueza absoluta, gracias a un don natural como la inteligencia, el corage o sentidos muy desarrollados, también puede deberse a otras carácteristicas como la resilencia.

 A pesar de que estoy más familiarizada con lo audiovisual, pienso que ambas, lectura y películas, tienen un mismo objetivo y utilizan la misma estratégia que he nombrado anteriormente. Pocas veces, o ninguna, he visto o leido una historia en la que el o la  protagonista sea pobre y acabe en esa situación  económica o muerto, tal vez sea que no he buscado mucho, en cuyo caso estaría reafirmando lo ya comentado en párrafos anteriores.

En conclusión, el sistema económico occidental esta basado en la lucha de los obreros que embriagados de ilusión buscan alcanzar lo que una clase social pequeña posee, matándose por conseguir un puesto de trabajo, alimentando su competitividad, orgullo y  soberbia, para alcanzar una felicidad aparente con ese lema que tanto se ha usado " el dinero no da la felicidad pero ayuda".

Esta lucha, que no son más que esfuerzos en vano, podría encauzarse hacia la eliminación de las clases sociales, lo que no significa aumentar los miembros pertenecientes a la clase menos favorecida, sino a eliminar el lema ya nombrado en el párrafo anterior, es decir, a prescindir del dinero para ser feliz y sabemos que para ser verdaderamente feliz solo se necesita tener un sitio para descansar, alimentar el alma y el cuerpo, salud y amor.

Como futura docente creo que la LIJ puede ofrecer esa otra cara de la sociedad y eliminar esas ilusiones falsas a través de libros dedicados a los niños que muestren la realidad de las clases  sociales y no se contenten con su posición "estamental", sino que busquen, desde vías pacíficas, acabar con las desigualdades sociales, ya que estar en este mundo debería significar vivir y no sobrevivir como llevamos haciendo desde hace siglos.